狐狸和马


La zorra y el caballo


一个农夫有一匹勤勤恳恳、任劳任怨为他干活的马,但这匹马现在已经老了,干活也不行了,所以,农夫不想再给马吃东西。 他对马说:"我再也用不着你了,你自己离开马厩走吧,到你比一头狮子更强壮时,我自然会把你牵回来的。"
说完,他打开门,让马自己去谋生去了。
这匹可怜的马非常悲哀,它在森林里茫无目标地到处徘徊,寒风夹着细雨,更增加了它的痛楚,它想寻找一个小小的避雨处。 不久,它遇到了一只狐狸,狐狸问它:"我的好朋友,你怎么了?为什么垂头丧气,一副孤苦伶仃、愁眉苦脸的样子呢?"马叹了一口气回答说:"哎--!公正和吝啬不能住在一间房子里。我的主人完全忘了我这许多年为他辛辛苦苦所干的一切,因为我不能再干活了,他就把我赶了出来,说除非我变得比一头狮子更强壮,他才会重新收留我。我有这样的能力吗?其实,主人是知道我没有这样的能力的,要不然,他也不会这样说了。"
狐狸听了之后,要它别愁了,只管放心,说道:"我来帮助你,你躺在那儿 ,把身子伸直,装做死了的样子,我自有办法。 "马按狐狸的吩咐做了。狐狸跑到狮子住的洞口边,对狮子说:"狮子大王,有条小路上躺着一匹死马,我们一同去,你可以作一顿很不错的午餐来享受哩。 "狮子听了非常高兴,立即就动身了。
它们来到马躺的地方,狐狸说:"在这儿你吃不完它,我告诉你怎么办:先让我把它的尾巴牢牢地绑在你的身上,然后你就能够将它拖回你的洞穴去慢慢地享用了。"狮子对这个建议很欣赏。 于是它一动不动地躺下来,让狐狸把它绑在马背上。 但狐狸却设法将它的腿捆在一起,用最大的力气把狮子牢牢地捆作一团,狮子没法挣脱束缚了。
一切料理完毕,狐狸拍了拍马的肩背说道:"起来吧!老马头,你可以走了!"那匹马跳起来,把狮子拖在尾巴后面离开了。 狮子知道上了狐狸的当,开始咆哮吼叫起来,巨大的吼声把树上所有的鸟儿都吓得飞走了。 但老马随便它怎么叫,只管自己慢慢悠悠地走过田野,终于把狮子拖到了主人的屋里。
它对主人说:"主人,狮子在这儿,我把它料理妥当了。"当主人看见它的这匹老马后,对它产生了怜悯之心,说道:"你就住在马厩里吧 ,我会好好待你的。 "于是,这匹可怜的老马又有了吃的东西,主人一直供养它到死去。
Tenía un campesino un fiel caballo, ya viejo, que no podía prestarle ningún servicio. Su amo se decidió a no darle más de comer y le dijo:
- Ya no me sirves de nada; mas para que veas que te tengo cariño, te guardaré si me demuestras que tienes aún la fuerza suficiente para traerme un león. Y ahora, fuera de la cuadra.
Y lo echó de su casa.
El animal se encaminó tristemente al bosque, en busca de un cobijo. Encontróse allí con la zorra, la cual le preguntó:
- ¿Qué haces por aquí, tan cabizbajo y solitario?
- ¡Ay! - respondió el caballo -. La avaricia y la lealtad raramente moran en una misma casa. Mi amo ya no se acuerda de los servicios que le he venido prestando durante tantos años, y porque ya no puedo arar como antes, se niega a darme pienso y me ha echado a la calle.
- ¿Así, a secas? ¿No puedes hacer nada para evitarlo? - preguntó la zorra.
- El remedio es difícil. Me dijo que si era lo bastante fuerte para llevarle un león, me guardaría. Pero sabe muy bien que no puedo hacerlo.
- Yo te ayudaré. Túmbate bien y no te muevas, como si estuvieses muerto.
Hizo el caballo lo que le indicara la zorra, y ésta fue al encuentro del león, cuya guarida se hallaba a escasa distancia, y le dijo:
- Ahí fuera hay un caballo muerto; si sales, podrás darte un buen banquete.
Salió el león con ella y, cuando ya estuvieron junto al caballo, dijo la zorra:
- Aquí no podrás zampártelo cómodamente. ¿Sabes qué? Te ataré a su cola. Así te será fácil arrastrarlo hasta tu guarida, y allí te lo comes tranquilamente.
Gustóle el consejo al león, y colocóse de manera que la zorra, con la cola del caballo, ató fuertemente las patas del león, y le dio tantas vueltas y nudos que no había modo de soltarse. Cuando hubo terminado, golpeó el anca del caballo, y dijo:
- ¡Vamos, jamelgo, andando!
Incorporóse el animal de un salto y salió al trote, arrastrando al león. Se puso éste a rugir con tanta fiereza que todas las aves del bosque echaron a volar asustadas; pero el caballo lo dejó rugir y, a campo traviesa, lo llevó arrastrando hasta la puerta de su amo.
Al verlo éste, cambió de propósito y dijo al animal:
- Te quedarás a mi lado, y lo pasarás bien - y, en adelante, no le faltaron al caballo sus buenos piensos, hasta que murió.